1.3 SI DIOS NOS AMA, LUEGO ENTONCES AMEMOS [A LOS DEMAS]
Texto: Romanos 1:8-15
Idea central: Nuestra fe debe ser evidente a todos por la forma en que vivimos, especialmente, por cómo nos preocupamos por el estado espiritual de los hijos de Dios.
Lecciones particulares:
— Nuestra fe debe mostrarse en amor y cariño real por todos los hijos de Dios (vv.8-13).
— Nuestro amor por los demás se muestra en que constantemente oramos por ellos: hacia allá tienden nuestros pensamientos (vv.9,10).
— Nuestro amor por los demás se muestra en que nos cultivemos unos a otros espiritualmente (vv.11,12).
— Nuestra fe (y amor) debe ser para con todos por igual, sea cómodo o incómodo para nosotros (vv.14,15).
— Dios es quien produce esta fe práctica –este amor– en nosotros (v.8).
Preguntas de introspección: ¿Es tu fe una fe viva, que salva, verdadera? ¿Oras por los hermanos? ¿Te preocupas por que ellos conozcan más a Dios? ¿Haces el esfuerzo activo de amar a todos, aunque de entrada no sean tu gente favorita? ¿Le das gracias a Dios por los cambios que va haciendo en tu corazón?
Historia sugerida: Parábola del buen samaritano (Lucas 10:30-37).
Tareas sugeridas: Haz una lista de las 7 personas que estén a tu derecha. Cada día acercarse a la siguiente en la lista y preguntarle qué pueden orar por ella, y hacerlo.