RESOLUCIONES PARA ENVEJECER CON DIOS
No quiero convertirme en un viejo gruñón, murmurador. Dios amenaza cosas terribles a los murmuradores (Salmo 106:25-26). Murmurar deshonra a Dios, quien ha prometido que todas las cosas obran para nuestro bien (Romanos 8:28). La queja apaga la luz de nuestro testimonio cristiano (Filipenses 2:14-15) y, por si fuera poco, un espíritu ansioso y criticón seca el gozo y la paz (Filipenses 4:6-7). No quiero nada de esto para cuando sea viejo.
Quiero ser como el hombre que envejece en el Salmo 71.
Así que he tomado las siguientes resoluciones:
- Recordaré con asombro y acciones de gracias las miles de veces que me he apoyado en Dios desde mi juventud. (v.17 Oh Dios, tú me has enseñado desde mi juventud, y hasta ahora he anunciado tus maravillas).
- Me refugiaré en Dios en lugar de ofenderme con mis problemas. (v.1 En ti, oh SEÑOR, me refugio; jamás sea yo avergonzado).
- Hablaré con Dios más y más (no menos y menos) de toda Su grandeza hasta que no haya lugar en mi boca para la murmuración. (v.6 De ti he recibido apoyo desde mi nacimiento; tú eres el que me sacó del seno de mi madre; para ti es continuamente mi alabanza. v.14 Mas yo esperaré continuamente, y aún te alabaré más y más).
- Esperaré (tenazmente) y no me entregaré a la desesperación, ni cuando esté en el asilo ni cuando viva más que todos mis amigos. (v.14 Mas yo esperaré continuamente, y aún te alabaré más y más).
- Buscaré gente y les contaré de los maravillosos actos de salvación de Dios, sin descanso, porque son innumerables. (v.15 Todo el día contará mi boca de tu justicia y de tu salvación, porque son innumerables).
- Recordaré que hay muchas y grandes cosas acerca de Dios que escapan a mi imaginación, y que pronto también conoceré. (v.18 Y aun en la vejez y las canas, no me desampares, oh Dios, hasta que anuncie tu poder a esta generación, tu poderío a todos los que han de venir).
- Contaré mis problemas y todo mi dolor como regalo de Dios y sendero a la gloria. (v.20 Tú que me has hecho ver muchas angustias y aflicciones, me volverás a dar vida, y me levantarás de nuevo de las profundidades de la tierra).
- Resistiré estereotipos de gente anciana, jugaré y cantaré y gritaré con alegría (sin importarme cómo me vea, digno o indigno). (v.22 Y yo te daré gracias con el arpa, cantaré tu verdad, Dios mío; a ti cantaré alabanzas con la lira, oh Santo de Israel; v.23 Darán voces de júbilo mis labios, cuando te cante alabanzas, y mi alma, que tú has redimido).
Feliz de irme a casa (contigo),
John Piper. Marzo 24 de 1993. [desiringgod.org]