Filipenses 1:13

Estándar

...Mis prisiones se han hecho patentes en Cristo en todo el pretorio, y a todos los demás (Filipenses 1:13).

El apóstol Pablo siempre se consideró un preso por la causa de Cristo; nunca por un delito. Estaba encadenado porque creía en Cristo, lo predicaba y lo representaba.

Desde el punto de vista de Roma, Pablo era un preso encadenado a un guarda romano. Pero desde la perspectiva de Pablo, los guardas romanos eran esclavos cautivos encadenados a él. El resultado de tal confinamiento fue que la causa de Cristo se había llegado a conocer “en todo el pretorio”. Lejos de ser una condición opresiva, a Pablo se le había dado la oportunidad de dar testimonio de Cristo a cada guardia asignado a él, cada seis horas.

¿Qué veían los soldados? Veían el carácter santo de Pablo, su misericordia, su paciencia, su amor, su sabiduría y su convicción. Al convertirse algunos miembros de la guardia del palacio, se difundía la salvación más allá de ellos hasta “…los de la casa de César” (Filisenses 4:22).

Por muy difícil que pueda parecer a primera vista, nadie es demasiado difícil de evangelizar. Sólo se necesita compromiso, valentía, dedicación y sobre todo la guía del Espíritu Santo. 

«que prediques la palabra; que instes a tiempo y fuera de tiempo; redarguye, reprende, exhorta con toda paciencia y doctrina.«

(2 Timoteo 4:2).

Lee. Medita. Aplica.

Anónimo

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s