Apuntes a Mateo 5:10

Estándar

10Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos. 11Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. 12Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.

Noten que el v.10 habla en sentido general, pero v.11-12 personaliza. En pocas palabras, tú y yo como testigos. Es imposible seguir las normas del reino de manera privada (los de la secreta). La rectitud de tu vida atraerá atención, incluso si la sola atención que levanta es oposición. Las bienaventuranzas no ocurren en espléndido aislamiento. Practicarlas con diligencia en un mundo pecaminoso (pobreza de espíritu, duelo, mansedumbre, hambre y sed de justicia, limpieza de corazón, pacificadoras), constituye un aspecto esencial de ser testigo de Cristo, y el testimonio dará lugar a persecución.

Resulta extraño que el v.9 hable de paz, ser hacedores de paz, y he aquí que entra la persecución. ¿El clímax, un anti-clímax? ¿Acaso no debieran otros recibir con alegría una gente humilde, mansa, pacificadora? Oh, no es así porque el bastión de paz que se empuña es el evangelio mismo, y el mundo está en rebelión con Dios. Cristo nos advierte una y otra vez que el evangelio será piedra de tropiezo a los que se pierden. Somos odiados por causa del evangelio.

Y es probable que ni siquiera hablemos una palabra sobre el evangelio, pero las vivencias y elecciones que hagamos -no persiguiendo pecados- será razón suficiente para que otros se ofendan, porque pensarán que les juzgamos, ya sea verdad o no.

Es interesante destacar que:

  1. es la única BV que Cristo expone y elabora, las demás son declaraciones diana y sencillas, Cristo no quiere que ninguno de los suyos forje esperanzas falsas. 
  2. hay una diferencia en el foco de atención de estas palabras: las primeras describen lo que el cristiano es en esencia, lo que busca y anhela, la forma como se comporta, pero ahora describe la reacción del mundo hacia los cristianos precisamente por ser lo que son

Noten que la bienaventuranza no está en tiempo pasado. Es muy presente (los que padecen persecución), han sido y siguen siendo:

(Hebreos 11 ilustra ejemplos de aquellos santos que, por ser santos y por causa de su fe, experimentaron vituperios y quebrantos, azotes, prisiones, apedreados, aserrados, etc. de los cuales el mundo no era digno).

(1 Corintios 4:9-13 Porque según pienso, Dios nos ha exhibido a nosotros los apóstoles como postreros, como a sentenciados a muerte; pues hemos llegado a ser espectáculo al mundo, a los ángeles y a los hombres. Nosotros somos insensatos por amor de Cristo, mas vosotros prudentes en Cristo; nosotros débiles, mas vosotros fuertes; vosotros honorables, mas nosotros despreciados.Hasta esta hora padecemos hambre, tenemos sed, estamos desnudos, somos abofeteados, y no tenemos morada fija.Nos fatigamos trabajando con nuestras propias manos; nos maldicen, y bendecimos; padecemos persecución, y la soportamos.Nos difaman, y rogamos; hemos venido a ser hasta ahora como la escoria del mundo, el desecho de todos) el sufrimiento apostólico,

(Juan 15:18-20 Si el mundo os aborrece, sabed que a mí me ha aborrecido antes que a vosotros. Si fuerais del mundo, el mundo amaría lo suyo; pero porque no sois del mundo, antes yo os elegí del mundo, por eso el mundo os aborrece. Acordaos de la palabra que yo os he dicho: El siervo no es mayor que su señor. Si a mí me han perseguido, también a vosotros os perseguirán; si han guardado mi palabra, también guardarán la vuestra; el sufrimiento de los creyentes

(Hechos 14:22 confirmando los ánimos de los discípulos, exhortándoles a que permaneciesen en la fe, y diciéndoles: Es necesario que a través de muchas tribulaciones entremos en el reino de Dios).

¿Qué significa persecución?

Persecución (RAE): Privación de derechos a un grupo o colectividad, como parte de un ataque generalizado o sistemático, fundado en razones de identidad del grupo o colectividad. Instancia enfadosa y continua con que se acosa a alguien a fin de que condescienda a lo que se solicita. Es la acción y efecto de perseguir (persecutio, de per “a través de” y sequi “seguir.”

No todo es persecución.

  1. Ir detrás de un objetivo o meta noble y bondadosa y luchar por ello no necesariamente tiene que ver con el evangelio. El Nobel de la Paz, por ejemplo.
  2. No se trata de persecución étnica o de persecuciones producto de la insensatez y fanatismo.
  3. No se trata de perseguidos por falta de gentileza o por falta de sabiduría al relacionarnos con otros. (Colosenses 4:6 Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno).
  4. Tampoco se trata de persecución por causa de nuestra imprudencia (Mateo 7:6 No deis lo santo a los perros, ni echéis vuestras perlas delante de los cerdos, no sea que las pisoteen, y se vuelvan y os despedacen).

Cristo es muy claro: persecución por causa de la justicia.

(1 Pedro 4:12-16 Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese, sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría. Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros. Ciertamente, de parte de ellos, él es blasfemado, pero por vosotros es glorificado.Así que, ninguno de vosotros padezca como homicida, o ladrón, o malhechor, o por entremeterse en lo ajeno; pero si alguno padece como cristiano, no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello). Padecer por causa de nuestra creencia y profesión de la verdad cristiana. Perseguidos por parecernos a Cristo.

Un ciclo sencillo de entender si recordamos que justicia se refiere a vivir conforme a la voluntad De Dios, no a mera obediencia de reglas. 

¿Por qué la persecución?

a) porque la conducta cristiana pone en evidencia al no cristiano; (Juan 3:19-20 Y esta es la condenación: que la luz vino al mundo, y los hombres amaron más las tinieblas que la luz, porque sus obras eran malas.Porque todo aquel que hace lo malo, aborrece la luz y no viene a la luz, para que sus obras no sean reprendidas; 7:7 No puede el mundo aborreceros a vosotros; mas a mí me aborrece, porque yo testifico de él, que sus obras son malas; 1 Pedro 4:4 A estos les parece cosa extraña que vosotros no corráis con ellos en el mismo desenfreno de disolución, y os ultrajan). Somos diferentes. “Tanta piedad me confunde” comentarios dentro de la misma iglesia, aislamiento…

b) porque el mundano rechaza la visión absoluta -cosmovisión- que el cristiano tiene de la vida en lo que respecta al único medio de salvación y a nuestros juicios morales. Nos acusan de ser cortos de vista, tontos, porque insistimos que hay valores absolutos, no negociables. (Prov 3:3 Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; Átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón). Es cierto que hay matices de gris, pero hay cosas que son absolutas. (Isaías 5:20  ¡Ay de los que a lo malo dicen bueno, y a lo bueno malo; que hacen de la luz tinieblas, y de las tinieblas luz; que ponen lo amargo por dulce, y lo dulce por amargo!).

c) porque son hijos del Enemigo; solo hay dos paternidades. (Apocalipsis 2:10 No temas en nada lo que vas a padecer. He aquí, el diablo echará a algunos de vosotros en la cárcel, para que seáis probados, y tendréis tribulación por diez días. Sé fiel hasta la muerte, y yo te daré la corona de la vida) Al no ser del mundo, somos una amenaza para ellos. (Juan 17:14 Yo les he dado tu palabra; y el mundo los aborreció, porque no son del mundo, como tampoco yo soy del mundo). (Juan 16:1-3 Estas cosas os he hablado, para que no tengáis tropiezo. Os expulsarán de las sinagogas; y aun viene la hora cuando cualquiera que os mate, pensará que rinde servicio a Dios.Y harán esto porque no conocen al Padre ni a mí). La noche de los hugonotes, 30,000 en la noche de Bartolomé.

Amadas, no somos perfectas pero amamos la justicia.  No somos conformistas, a medida que se ilumina el entendimiento nos esforzamos por vivir a la nueva luz recibida. Siendo transformados de gloria en gloria en la imagen de nuestro Señor. (Prov 4:18 Mas la senda de los justos es como la luz de la aurora, Que va en aumento hasta que el día es perfecto).

¿Formas de la persecución?

En nuestro país no sufrimos persecuciones dramáticas. Nadie interrumpe mientras nos reunimos los domingos, o en tu reunión de grupos, y arrastra contigo a la prisión. Así que, ¿qué tenemos aquí?

a) si nunca has experimentado persecución en tu vida, si nadie se ofende por tu manera de vivir, ¿no debiera servirte de advertencia? ¿Quizás no luzcas como peregrino y extranjero sino más bien como un nativo del mundo?

b) ataques verbales: vituperios, digan toda clase de mal. Vituperio es insultar con oprobios, envilecer, avergonzar; ser objeto de burlas e insultos. (Mateo 10:25 Bástale al discípulo ser como su maestro, y al siervo como su señor. Si al padre de familia llamaron Beelzebú, ¿cuánto más a los de su casa?). Para el inconverso es una locura ir dos veces al templo los domingos. (1 Corintios 1:18 Porque la palabra de la cruz es locura a los que se pierden; pero a los que se salvan, esto es, a nosotros, es poder de Dios). ¿Toda clase de mal? Difamación. Mintiendo.

c) ataques físicos: os persigan, maltrato. 

d) aislamiento social (las cancelaciones postmodernas) (Lucas 6:22 Bienaventurados seréis cuando los hombres os aborrezcan, y cuando os aparten de sí, y os vituperen, y desechen vuestro nombre como malo, por causa del Hijo del Hombre) como si fuéramos una plaga maligna que contamina.

La persecución vendrá de una forma u otra. Esta bienaventuranza sirve de prueba para el resto de las otras. ¿Somos peregrinas y extranjeras o parecemos nativas del mundo?

La persecución enseña a:

dependender en Dios, porque no tenemos otro recurso que nos ayude que no sea Dios;

distanciar del mundo, porque te percibirán como juez de acciones ajenas (aunque no lo seas) y te rechazarán;

glorificar a Dios al resistir con gracia, con entendimiento.

Ser de carácter es sufrir voluntariamente. Carácter lleva el fruto de identificación con Cristo y observen que el Señor cierra esta bienaventuranza diciendo “de ellos es el reino de los cielos.”

Es un tema personal, de lo general a lo particular.

¿Esperabas navegar en aguas tranquilas y reposadas? 

Es interesante que el v.12 menciona a los profetas. Si recordamos, muchos vivieron en cuevas, fueron alimento de leones, cazados, quemados vivos en hogueras, etc. por hablar las palabras del evangelio.

Ahora noten la belleza de las palabras del Señor, que en lugar de empezar con “Ay de vosotros” como los dichos de los profetas, inicia con “bienaventurados” ¿Ven por qué hemos de alegrarnos y gozar pues nuestro galardón (Cristo mismo) es grande en los cielos?

Cristo resetea las expectativas de los discípulos, enseña que ser seguidor de Cristo retira obstáculos y nos vuelve maravillosas…  No. 

Hemos de estudiar la palabra de Dios y ser transformadas por ella, en bienaventuranza. ¿Por qué recibimos bendiciones? (Colosenses 3:13-14 soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto). Porque Cristo nos redimió de la maldición de la ley, El absorbió la maldición y nos liberó para recibir su Espíritu mediante la fe.

¿Qué hacer, entonces?

Regocijarnos como cristianos y aún, saltar de gozo (la palabra griega que el Señor Jesús usa en el texto). Es el mensaje a todo lo largo del NT.

(Hechos 5:40-41 Y convinieron con él; y llamando a los apóstoles, después de azotarlos, les intimaron que no hablasen en el nombre de Jesús, y los pusieron en libertad.Y ellos salieron de la presencia del concilio, gozosos de haber sido tenidos por dignos de padecer afrenta por causa del Nombre). (Filipenses 2:17-18 Y aunque sea derramado en libación sobre el sacrificio y servicio de vuestra fe, me gozo y regocijo con todos vosotros.Y asimismo gozaos y regocijaos también vosotros conmigo) Pablo preso en Roma …me gozo y regocijo con todos…

( Hebreos 10:34 Porque de los presos también os compadecisteis, y el despojo de vuestros bienes sufristeis con gozo, sabiendo que tenéis en vosotros una mejor y perdurable herencia en los cielos)… herencia en los cielos… 

(Santiago 1:2-3 Hermanos míos, tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas,sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia) …tened x todo gozo;

(1 Pedro 4:12-14,16 Amados, no os sorprendáis del fuego de prueba que os ha sobrevenido, como si alguna cosa extraña os aconteciese,sino gozaos por cuanto sois participantes de los padecimientos de Cristo, para que también en la revelación de su gloria os gocéis con gran alegría.Si sois vituperados por el nombre de Cristo, sois bienaventurados, porque el glorioso Espíritu de Dios reposa sobre vosotros. Ciertamente, de parte de ellos, él es blasfemado, pero por vosotros es glorificado. Así que, ninguno de vosotros padezca como homicida, o ladrón, o malhechor, o por entremeterse en lo ajeno; pero si alguno padece como cristiano, no se avergüence, sino glorifique a Dios por ello) …amados no os sorprendáis… 

Un verdadero cristiano no tiene alternativa: es una orden. Gozaos. Alegraos. Tened por sumo gozo. No somos masoquistas ni insensibles al dolor, estos textos enseñan que el cristiano es capaz de moderar y aún dominar sus emociones. 

3“Bienaventurados los pobres en espíritu, porque de ellos es el reino de los cielos.

4“Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.

5“Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.

6Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.

7Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.

8Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.

9Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.

10Bienaventurados los que padecen persecución por causa de la justicia, porque de ellos es el reino de los cielos.

11Bienaventurados sois cuando por mi causa os vituperen y os persigan, y digan toda clase de mal contra vosotros, mintiendo. 12Gozaos y alegraos, porque vuestro galardón es grande en los cielos; porque así persiguieron a los profetas que fueron antes de vosotros.

Amén.

Apuntes a Mateo 5:9 (parte 2)

Estándar

Ahora bien, ¿cómo se hace la paz?

¿Paz? en la Escritura la palabra es usada de dos maneras: 

  1. describe una condición interna del individuo [estado tranquilo del alma que está segura de su salvación por medio de Cristo y por tanto no teme nada que pueda venir de parte de Dios, y al mismo tiempo está contenta con su porción terrenal]. (Juan 14:27 La paz os dejo, mi paz os doy; yo no os la doy como el mundo la da. No se turbe vuestro corazón, ni tenga miedo) lo opuesto a un corazón ansioso, temeroso; paz de alguien que canta con convicción “estoy bien con mi Dios.” 
  2. describir una condición de armonía y unidad entre dos personas o grupos de personas. Ejemplo: dos naciones. Mateo 10:34-35 Cristo contrapone la palabra paz con lo opuesto a ella, no paz, sino espada, porque la simiente de Dios es contraria a la del Enemigo. Cristo trae paz al corazón del hombre, de sus discípulos, porque he venido a traer tensión entre padres e hijos, vecinos, etc. ¿Será que el cristiano vive metido en problemas? No, sino un pacificador es alguien que se encuentra activamente involucrado en remover aquellos factores que producen enemistad o animosidad entre dos personas o grupos de personas. 

¿Quién es un pacificador? Alguien reconciliado con Dios. Remueve todo aquello que alimente fuegos y contiendas! No le echa más leña al fuego! (Hebreos 13:20, Isaias 9:6, Colosenses 1:19-21 por cuanto agradó al Padre que en él habitase toda plenitud, y por medio de él reconciliar consigo todas las cosas, así las que están en la tierra como las que están en los cielos, haciendo la paz mediante la sangre de su cruz. Y a vosotros también, que erais en otro tiempo extraños y enemigos en vuestra mente, haciendo malas obras, ahora os ha reconciliado, Romanos 5:1).

Amadas, la paz que Dios nos provee en el evangelio no es meramente vertical, también es horizontal -con los hombres. (Efesios 6:15 y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz). 

¿Cómo éramos antes? (Tito 3:3 Porque nosotros también éramos en otro tiempo insensatos, rebeldes, extraviados, esclavos de concupiscencias y deleites diversos, viviendo en malicia y envidia, aborrecibles, y aborreciéndonos unos a otros) Ay! Vivimos en un mundo de lobos, ¿raíz? el egoísmo y egocentrismo natural del hombre. Todos aspiramos a ser el sol del universo y que el resto gire a nuestro alrededor. ¿se imaginan si cada planeta fuera independiente y se rebelara contra su órbita?

Eso éramos… Pero por mera gracia de nuestro Señor hemos sido transformadas.

¿Cómo puedo saber si soy pacificadora? ¿Manifestaciones tangibles?

  1. quietud interna, como resultado de saber que han sido reconciliados con Dios. Espíritu quieto y reposado que le permite mantener una actitud calmada en medio de los problemas que se puedan presentar. Salmo 27:3 Saben que Dios los defiende y no se afanan en defenderse a sí mismos. 
  2. no pierde a Dios de vista, no responde con amargura o agresividad; pero hay diferencias: el creyente percibe en su interior la gracia que lo mueve a actuar con mansedumbre, el cristianos lucha porque prevalezca esta tendencia de gracia (el incrédulo se gloría de su belicosidad -yo no soy fácil), si es vencido por el pecado, el cristiano experimenta pesar, y en arrepentimiento pide perdón a Dios y a todos los que ha ofendido. 
  3. cuidado al hablar y al escuchar. Recuerden la estrecha conexión entre pleitos y lengua. (Santiago 3:6 Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo, e inflama la rueda de la creación, y ella misma es inflamada por el infierno)la rueda de la creación vendría a ser el ciclo completo de la vida de una persona, desde la cuna hasta la tumba. Hemos de vigilar siempre ese pequeño miembro, lleno de veneno mortal como medio de expresión de la abundancia del corazón. 

¿Cómo ser pacificadoras, en lo práctico? 

Piensa en tus relaciones clave, ¿cómo ser una hija que aparte la ofensas? ¿Cómo ser hermana, amiga, madre?

  1. cuida de propagar sin necesidad los defectos, errores y pecados ajenos. Pocas cosas son tan mortíferas como el chisme, y pocas cosas son tan efectivas también para crear problemas. (Prov 16:28 El hombre perverso levanta contienda, y el chismoso aparta a los mejores amigos) Póngalo en femenino: la chismosa es una perversa y viceversa; sus palabras procuran levantar contienda, al punto de enemistar a los mejores amigos. Evita escuchar reportes negativos de otros. ¿Que es un chisme? Un chisme es un comentario negativo de otra persona, dicho a quien no se debe decir. (Prov 11:13 El que anda en chismes descubre el secreto; mas el de espíritu fiel lo guarda todo; 20:19 El que anda en chismes descubre el secreto; no te entremetas, pues, con el suelto de lengua) Y tan chismoso es el que habla como el que escucha. El pacificador amonesta primero al chismoso y luego exhorta a que resuelva con la persona en cuestión. ¿y si el otro no responde? da un tiempo prudente a que resuelva, y si no es así, decirle al tercero que el segundo tiene un problema con él (consejo pastoral en ocasiones). 
  2. cuida de lo que hables en sentido general, en especial en medio de un conflicto. (Colosenses 4:6, 3-4 Sea vuestra palabra siempre con gracia, sazonada con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada uno; orando también al mismo tiempo por nosotros, para que el Señor nos abra puerta para la palabra, a fin de dar a conocer el misterio de Cristo, por el cual también estoy preso, para que lo manifieste como debo hablar) contenido y forma al hablar en todo momento. ¿Manto de gracia? lenguaje resultado de la obra de la gracia de Dios en el corazón. No abusivo, no vengativo, siguiendo el ejemplo de Cristo quien al ser injuriado nunca respondió con maldición; lenguaje veraz y lleno de amor Efesios 4:15. Sin sacrificar el amor por la verdad, ni la verdad por el amor.
  3. no ser insípidos, desabridas al hablar. El hablar cristiano no corrompe al oyente sino que edifica, preserva igual que la sal. (Efesios 4:29 Ninguna palabra corrompida salga de vuestra boca, sino la que sea buena para la necesaria edificación, a fin de dar gracia a los oyentes
  4. ¿hablaste demás? Si nuestras palabras no fueron vehículo de la gracia de Dios, entonces hablamos demás. Palabra sazonada con sal estimula a pensar, no es pérdida de tiempo, no es lenguaje que repugna o cae mal, sino que atrae y tiene canto espiritual.
  5. Hablar con gracia, sazonado con sal, en lo ordinario, nos será de práctica para hacerlo en medio de conflictos. Tiende a pacificar, reconciliar, no a enchinchar. El pacificador mide sus palabra porque sabe cómo responder a cada uno. No usa palabras hirientes, irónicas, se esfuerza para que el otro comprenda lo dicho y evitar malos entendidos. (Salmo 141:3 Pon guarda a mi boca, oh Jehová; guarda la puerta de mis labios; Prov 10:32 Los labios del justo saben hablar lo que agrada; mas la boca de los impíos habla perversidades; 16:23-24 El corazón del sabio hace prudente su boca, y añade gracia a sus labios. Panal de miel son los dichos suaves; suavidad al alma y medicina para los huesos);  guarda a sus labios (¿es sabio lo que voy a decir, edifica?), hablar lo que agrada, suavidad para el alma y medicina a los huesos, pero el rencilloso… Prov 18:6 Los labios del necio traen contienda; y su boca los azotes llama; 12:18 Hay hombres cuyas palabras son como golpes de espada; mas la lengua de los sabios es medicina) es verdad que hay momentos para amonestar, reprender, la misma voz de Dios como una espada (Hebreos 4:12) pero Dios hiere para arrepentimiento, no para enchinchar. 
  6. El Espíritu Santo trae la palabra de Dios para traer cordura: no tengo justificación alguna.

¿Cómo puedo saber si soy pacificadora? ¿Ven el reto ahora? Tenemos una doble lengua. Porque nuestras palabras tienen poder (Proverbios 18:21 Muerte y vida están en poder de la lengua, y los que la aman comerán su fruto) (¿notan la doble lengua aquí?). Un verso escalofriante y al mismo tiempo de esperanza porque si la muerte y la vida están en la lengua luego entonces quizás pueda yo escoger palabras de vida y comer ese fruto. Nuestras palabras tienen poder, un doble poder: el poder de crear y el poder de destruir.

Chisme. Chisme y calumnia destruye el carácter. No hay vía más rápida. La gente cree las cosas que digamos de otros. ¿Por qué lo hacemos? Porque nuestros corazones no siguen la ley real, porque no elevamos al otro por encima de nosotros sino que nos elevamos a nosotros mismos.

Crítica. Crítica destruye relaciones. Destruye la confianza de otros, si creciste con padres criticones sabes exactamente lo que estoy diciendo.

Sarcasmo. Sarcasmo destruye confianza. El otro nunca sabe que terreno pisa, si lo que tú dices va en serio o es broma. Si escarbas un poco, te darás cuenta que la persona sarcástica en lo secreto se cree más lista que los demás, que su humor es un poco más sutil, etc. Las personas se sienten inseguras a su alrededor, porque no saben si habla en serio o no. No es difícil ser sarcástica, es mucho más difícil aprender gentileza.

Elevar la voz destruye comunicación. 

¿Se dan cuenta que cualquiera de estas cosas me eleva por encima de otros o pone a los demás en situaciones débiles? ¿Los pone en desventaja de modo que yo tenga ascendencia? En conflicto directo con la ley real.

Pero hay buenas noticias. Nuestras palabras también tienen poder para crear.

Honestidad. Hablar con honestidad crea confianza. Di lo que tengas que decir de manera no amenazadora. Desarrolla un lugar seguro: podrás dar cualquier opinión y será escuchada, sin retribuciones ni amenazas de unos contra otros. Aprende a escuchar, especialmente a personas de opiniones contrarias; nos moldea, nos conforma cuando oímos cómo razonan otros; bríndales un lugar seguro para hablar y decir lo que piensan, date oportunidad de escuchar, de ser lenta para hablar y no airarte.

Perdonar. Hablar de perdón crea sanidad. ¡Cuánto poder tienen nuestras palabras! Poder decir a otra persona que una está equivocada tiene poder. Y cuán difícil es admitir esas palabras. Y cuán fácil es hablar aquellas otras palabras que debilitan y rompen relaciones!

Alentar. Hablar de estímulo crea confianza. ¿Conoces a alguien que siempre tiene palabras de aliento? Tales personas son un ejemplo maravilloso, don del cielo. Una rareza, reconocemos que son verdaderas y nos atraviesan con su don.

Amadas, el pecado es impetuoso, la gracia es delicada y gentil. ¿Qué hace un pacificador? Se esfuerza en refrenar el ímpetu de primeros pensamientos y pasar los segundos por el filtro de las verdades bíblicas. Romanos 12:21 vence con el bien el mal; 

El pacificador no responde al necio, no se deja arrastrar a lo mismo. (Prov 10:19 En las muchas palabras no falta pecado, mas el que refrena sus labios es prudente; 3:3 Nunca se aparten de ti la misericordia y la verdad; átalas a tu cuello, escríbelas en la tabla de tu corazón; 20:15 Hay oro y multitud de piedras preciosas; mas los labios prudentes son joya preciosa.) Joya escasa y preciosa. Un corazón puro hablará cosas puras, porque de la abundancia del corazón habla la boca, (y pensará cosas puras). (Santiago 1:26 Si alguno se cree religioso entre vosotros, y no refrena su lengua, sino que engaña su corazón, la religión del tal es vana) y no refrena su lengua… tus labios son el departamento de publicidad de tu corazón. 

Un último punto:

cuidado con las subjetividades del corazón. Se esfuerzan por no guiarse por subjetividades del corazón. ¿Subjetividades? Todos aquellos factores internos que solo pueden ser conocidos por el individuo que los posee, los cuales constituyen la base de sus acciones y conductas. Pensamientos privados, intuiciones, impresiones, sentimientos, emociones… factores internos. Contrastan con los factores objetivos los cuales pueden ser definidos, evaluados, por otros. ¿Un factor objetivo? Hace calor, por ejemplo. 

El subjetivo termina fabricando en su interior la información que no tiene y forma prejuicio, de tal modo que empieza a examinar detalles de otros que ni siquiera saben que están en la mesa de picoteo. El expediente irá creciendo, cada vez más grueso. 

El pacificador procura confirmar objetivamente sus sospechas. También tiene sentimientos, impresiones, intuiciones, pero no se deja dominar por ellos, sabe que no son factores infalibles y de hecho sabe que la escritura prohíbe dejarse guiar por tales factores, Juan 7:24… no juzguéis según las apariencias. 1 Samuel 16:6 Samuel y Eliab, al verlo. 

Una persona subjetiva no es pacificadora, imposible. Ojo: las escrituras no prohíben hacer juicio sobre actuaciones ajenas, ¿cómo podríamos amonestar entonces? Aun en tal caso, cuidarse de no realizar conjeturas apresuradas. 1Corintios 4:5 seamos objetivos, no querer ver lo que está fuera de nuestro alcance. Isaías 11:2-3 visión profética del Mesías, y hemos de imitarle!

Las palabras tienen poder para crear y poder para destruir. Oh Dios, bendito seas porque a medida que te conocemos Tú cambias nuestro hablar más y más en palabras de vida, palabras que edifiquen y den fruto (Colosenses 4:5-6 Andad sabiamente para con los de afuera, aprovechando bien el tiempo. Que vuestra conversación sea siempre con gracia, sazonada como con sal, para que sepáis cómo debéis responder a cada persona).

¿la recompensa de la bienaventuranza?

Ser reconocidas por Dios mismo como hijas de Dios. Y por todos alrededor. Cristo, el primero de muchos hermanos, el príncipe de paz, nos hace co-herederos de su gracia. Seremos llamadas hijas de Dios.

¿Cómo te conocen tus compañeros, hermanos, colegas, profesores, etc.? ¿Cuál es el retrato mental que otros tienen de ti?

Ni sensible, susceptible, o estar a la defensiva (M.Lloyd Jones). 

¿Cómo reaccionas cuando las cosas no salen como tú quieres? 

Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca. Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias.Y la paz de Dios, que sobrepasa todo entendimiento, guardará vuestros corazones y vuestros pensamientos en Cristo Jesús. Filipenses 4:5-7

Apuntes a Mateo 5:9 (parte 1)

Estándar

9Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.

Carácter exhibe el fruto de reconciliación.

¿Qué esperaban los discípulos? ¡Bien aventurados los que hacen guerra a nuestros enemigos! Una vez más nuestro Señor desbarata las expectativas de quienes estaban ahí y llama bienaventurados a los pacificadores. Observen que no habla de pacifistas, porque hay una gran diferencia. El 30 de Enero se celebra el Día Internacional de la Paz, en conmemoración por la muerte de Mahatma Gandhi, pero ese mismo día hubo toda clase de guerras y contiendas.

PACIFISMO: conjunto de doctrinas encaminadas a mantener la paz entre las naciones (Wikipedia). ¿Medios? la no violencia activa, la diplomacia, la desobediencia civil, el boicot, la objeción de conciencia, las campañas de divulgación y la educación por la paz.

PACIFICADOR: del latín pacificator -oris; que pacifica, restablece la paz alterada en un país, o que reconcilia a los que están enemistados.

En el primer caso, un pacifista o alguien que mantiene la paz, es alguien que evita conflictos al mantener todo lo más suave posible. En el segundo caso es alguien que activamente busca reconciliar una parte con otra.

El hombre tiene un gran deseo de paz, pero somos incapaces de llevarla a cabo. ¿Por qué? Porque el problema no es el sistema, sino el corazón del hombre. (Hebreos 12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor). Como señala nuestra BV anterior, los de limpio corazón verán a Dios. He aquí el mismo concepto: Nadie puede participar sin santidad. Pero la santidad no camina sola, el verso es contundente. Incluso la sabiduría de lo alto, primeramente pura, después pacífica. Santiago 3:17 Pero la sabiduría que es de lo alto es primeramente pura, después pacífica, amable, benigna, llena de misericordia y de buenos frutos, sin incertidumbre ni hipocresía. La conexión de las bienaventuranzas es perfecta.

Los puros de corazón son necesariamente pacificadores. Los puros se evidencian porque son pacificadores.  (Proverbios 27:21 El crisol es para la plata y el horno para el oro, y al hombre se le prueba por la alabanza que recibe). Refinar el proceso es quitar impurezas; observen que la cantidad de oro permanece igual, pasiva, al refinarlo. Perseverancia es una cualidad que demanda admiración. No tiene nada en común con resignación. Algunos creen que, como son incapaces de evitar circunstancias, deben resignarse a ellas. “Lo que será, será.” Resignarse es un acto pasivo; termina en derrota. Perseverar es activo; termina en triunfo. El creyente persevera en el Señor Jesús, Autor y Consumador de la Fe (Hebreos 12:2 puestos los ojos en Jesús, el autor y consumador de la fe, quien por el gozo puesto delante de El soportó la cruz, menospreciando la vergüenza, y se ha sentado a la diestra del trono de Dios).

¿Pacificadores?

Recuerden que la intención primaria de las bienaventuranzas no es trazar una ruta, sino aprender a vernos en el espejo. Los puros de corazón son necesariamente pacificadores. Pureza que toca el centro de nuestra personalidad; para la cultura hebrea el centro es el corazón (mente, emociones, voluntad) (Prov 4:23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida). 

  1. ser pacificador no es negociar verdades. Una cosa es ser amables con todos, otra cosa es ser indiferentes a sus pecados o asociarse en intimidad. Josafat y Acab (2 Crónicas 19:1-2 Josafat rey de Judá volvió en paz a su casa en Jerusalén.Y le salió al encuentro el vidente Jehú hijo de Hanani, y dijo al rey Josafat: ¿Al impío das ayuda, y amas a los que aborrecen a Jehová? Pues ha salido de la presencia de Jehová ira contra ti por esto). Ser pacificador no significa comunión íntima con cualquier persona, no es negociar lo que sea, hasta lo que no se puede, con tal de mantener la paz.
  2. no es sacrificar la verdad en aras de la paz. (Prov 23:23 Compra la verdad, y no la vendas; La sabiduría, la enseñanza y la inteligencia).
  3. no es saber que se ha hecho algo digno de reprensión y no hacer nada al respecto, por el supuesto deseo de mantener la paz.

18Y la semilla cuyo fruto es la justicia se siembra en paz por aquellos que hacen la paz.

¿Perciben la diferencia? Santiago 4:18 no dice los que mantienen la paz sino los que hacen la paz. Somos llamadas a hacer la paz entre Dios y los hombres al compartir el evangelio y entre hombres y hombres como señal de ese mismo evangelio. Reconciliación vertical y reconciliación horizontal.

¿Cuál es la diferencia entre uno y otro?

Los que mantienen la paz son como la ONU, evitan confrontaciones, conflictos, etc., a toda costa. No van a la raíz de los problemas, se quedan en la superficie. Mantienen la paz. Soluciones a corto plazo de conflictos prolongados. Es el camino de la menor resistencia. El producto de una visión centrada en mí persona.

En casa, por ejemplo, lo fácil que es apartar los niños y mandarlos a cuartos separados…mantiene la paz, se hace el silencio, pero el problema sigue ahí. Hacer la paz es mantenerlos juntos, confesar, buscar perdón y reconciliación de modo que se honre a Dios y se honren unos a otros; claro que es más difícil y toma tiempo! El producto de una visión centrada en Dios y en otros.

Mantener la paz es tener una visión corta; vivir el momento. Es algo pasivo, evitar explosión y punto.

Hacer la paz es tener visión a largo plazo. Es activo, busca restauración de relaciones. El sendero del discipulado. ¿Qué haces con tus hijos? ¿Eres de las que usan la TV-nana? 

Aplacar la guerra no es traer paz. Aplazar el conflicto no es solucionarlo. Un pacificador mitiga el conflicto, apaga fuegos, es mucho más que una gente pacífica o que un pacifista.

Pacificador, gr: un paz-hacedor.

(2 Corintios 5:20 Así que, somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os rogamos en nombre de Cristo: Reconciliaos con Dios) embajadores…reconciliaos con Dios.

(Romanos 5:10 Porque si siendo enemigos, fuimos reconciliados con Dios por la muerte de su Hijo, mucho más, estando reconciliados, seremos salvos por su vida) reconciliados Somos embajadores, evangelistas, responsables de vivir vidas y hablar palabras que conduzcan a otros a reconciliarse con Dios. La persona pacificadora:

  1. controla su lengua. (Prov 16:28 El hombre perverso levanta contienda,Y el chismoso aparta a los mejores amigos) un cristiano va apagando fuegos, verbales y digitales. Ojo con la lengua digital.
  2. abunda en amabilidad. (Filipenses 4:5 Vuestra gentileza sea conocida de todos los hombres. El Señor está cerca
  3. paz interior. Hemos de vivir esa serenidad incomprensible, (Salmo 27:3 Aunque un ejército acampe contra mí, No temerá mi corazón;Aunque contra mí se levante guerra,Yo estaré confiado). Sé que Dios es soberano. (Números 16:4 Cuando oyó esto Moisés, se postró sobre su rostro) el motín de Coré, Moisés no levanta ningún ejército sino que se postra en tierra y ora al Señor.

CONVICCION: Idea religiosa, ética o política a la que se está fuertemente adherido. Del latín convictio, es el convencimiento que se tiene sobre algo. Persuasión consciente, como dijo la hermana Ercilia.

Apuntes a Mateo 5:8

Estándar

8Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios.

¿Quienes son los limpios, puros, de corazón?

A primera vista parece tratarse de personas cuyo corazón es moralmente inmaculado. La bienaventuranza recuerda a Ezequiel 36:25-26 (Esparciré sobre vosotros agua limpia, y seréis limpiados de todas vuestras inmundicias; y de todos vuestros ídolos os limpiaré. Os daré corazón nuevo, y pondré espíritu nuevo dentro de vosotros; y quitaré de vuestra carne el corazón de piedra, y os daré un corazón de carne), pero esta pureza no es asunto de mera limpieza sino compromiso del corazón y la voluntad hacia Dios.

Observen que Jesucristo confiere bendición especial a los puros de corazón, no a los sabios intelectuales, no a los piadositos emocionales. Para los hebreos, hablar del corazón significa hablar del centro de la personalidad… 

Noten que el Señor es muy concreto sobre qué debe estar limpio: no habla de la conciencia ni de estar en paz con una misma. Es cierto que Dios nos ha provisto de una conciencia, quien dice no tener ley revela que es ley para sí misma pues bien que sabe cuando algo anda bien o anda mal. Pero no podemos confiar 100% en esta conciencia, pues se encuentra dañada por el efecto del pecado, aparte de que se va cauterizando con la repetición de lo mal hecho y, sin embargo, mostrarse muy campante y tranquila. Conciencia tranquila no es sinónimo de corazón limpio.

Prov 21:2 Todo camino del hombre es recto en su propia opinión; pero Jehová pesa los corazones.

Había una tradición Rubenita que lidiaba con el tema de la limpieza, más de 200 páginas en 11 diferentes tratados (tratado: discusión de un tópico) sobre asuntos como el lavado ceremonial de vasos, lavado ceremonial de tiendas, cisternas, el lavado de manos y etc. Pero no había una sola página para la limpieza de corazón. De modo que las palabras del Señor son nuevas e inesperadas hasta para nuestros queridos discípulos, acostumbrados a las enseñanzas de escribas y fariseos.

PUREZA: del latín purus = puro, y el sufijo -eza = cualidad. Así, pureza es la cualidad de puro (aquel o aquello que está libre y exento de toda mezcla de otra cosa, que no incluye ninguna condición, excepción o restricción ni plazo o que está exento de imperfecciones morales). Por ejemplo, la pureza del agua; la pureza del oro de 24 quilates.

La identidad del creyente es reconocer la suciedad de su corazón y la necesidad de ser limpios, puros, lavados en el Señor Jesucristo. Limpio es quien sabe que está sucio y hace lo que tiene qué hacer: acudir a la cruz de Cristo.

La bienaventuranza no se refiere al aspecto, no dice bienaventurados los que parecen limpios. Es muy fácil vigilar nuestra limpieza exterior, lo que otros ven, un curriculum impecable. Pero sabemos que Dios ve lo profundo del corazón, aun cuando seamos expertas en tejer hojas de higuera espirituales. (Proverbios 4:23 Sobre toda cosa guardada, guarda tu corazón; porque de él mana la vida). Por si lo ignoramos, el corazón siempre nos acompaña; donde quiera que vayamos el corazón afectará lo que somos: relaciones personales, vivencias… de tal modo que cualquier cambio verdadero debe empezar por el corazón; transformación de dentro hacia afuera, en pocas palabras.

Dejemos de buscar excusas: ay si mi marido, ay si la política, ay si tuviera tal cosa, ay si me quitaran tal cosa, ay si… etc. Pero el problema es mi corazón, lo único que es necesario cambiar. En el Edén, Adán culpó a Eva; Eva, a la serpiente. Y nosotras, a la política, a los padres, a la economía, a la educación, al coronavirus, a la crisis, y un largo etc. La bienaventuranza señala el corazón. Mi corazón. Tu corazón.

En la Escritura el corazón es el asiento de las decisiones. Mucho más que emociones, sentimientos. Es la semilla de los deseos, que no son precisamente buenos, que es necesario purificar. Y esto es lo que sucede con las tribulaciones o cuando enfrentamos las consecuencias de nuestro pecado. Y, de repente, aquello que deseamos ahora se ve diferente. Hemos sido cambiados. El Señor es fiel, usa lo necesario para cambiar los deseos de nuestro corazón. (Salmo 37:4 Deléitate asimismo en Jehová, y él te concederá las peticiones de tu corazón; del 1-11 realmente). Significa que nos dará nuevos deseos en un nuevo corazón.

¿Cómo entender la expresión ‘un corazón limpio’?

Recordemos que todas las bienaventuranzas citan virtudes del carácter cristiano, el ADN de quienes SOMOS, ciudadanas del reino de los cielos. Pobres en espíritu, los que lloran, los mansos, los de hambre y sed de justicia, los misericordiosos, en la misma línea ocurre este atributo: limpieza de corazón. Salmo 24:3-6 ¿Quién subirá al monte de Jehová? ¿Y quién estará en su lugar santo? El limpio de manos y puro de corazón; el que no ha elevado su alma a cosas vanas, ni jurado con engaño. Él recibirá bendición de Jehová, y justicia del Dios de salvación.Tal es la generación de los que le buscan, de los que buscan tu rostro, oh Dios de Jacob. Selah

¿Quien tiene el privilegio de entrar en la presencia de Dios? ¿Recibido en audiencia por el Rey de gloria? 

Un carácter humilde, sencillo, fiel, noble, sincero, sin hipocresías, sin doblez, puro, delante de Dios, y que le ama por encima de todas las cosas. 

Ok, pensarán ustedes en mujeres superhéroes, superpoderosas…

Pero la Escritura nos ofrece el ejemplo de David y Betsabé. David fue atrapado y al descubrirse el horror de su pecado clama a Dios abrumado: ¡crea en mí un corazón limpio!

La Escritura no presenta superhéroes perfectos, son hombres y mujeres pecadores, arrepentidos, levantados por la gracia de Dios, para que aprendamos que Dios hace lo mismo cada día con nosotras. Ahora bien, ¿basta la sinceridad? Luego decimos “la intención es lo que cuenta” “lo importante es que lo hacen con fe” Mentira. Los profetas de Baal (1 Reyes 18) clamaron a su dios, una fe sincera pero completamente falsa. Porque es importante en quién ponemos la fe.

Bienaventurados los de limpio corazón porque ellos verán a Dios. El error es quitar a Dios de la frase. Corazón limpio, pureza, es respecto a Dios, no a otra cosa ni a cualquier líder religioso.

¿Cómo se evidencia la pureza de corazón?

a) Por la existencia de verdadera inclinación a la santidad de pensamientos, de motivaciones, de actitudes, de conducta.

b) Cuando tenemos conciencia y carga por las impureza que todavía permanecen en el corazón, pero confiadas en que Dios obra (Filipenses 1:6 estando persuadido de esto, que el que comenzó en vosotros la buena obra, la perfeccionará hasta el día de Jesucristo) y como hijas de Dios le veremos tal como es él (1 Juan 3:2 Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es). Quien es pura de corazón conoce sus corrupciones internas y lucha a cada momento esa tendencia a rebelarse contra la voluntad de Dios.

c) Por la preocupación de hacer uso de los medios de gracia y crecer en santidad.

¿Meta? Ser igual a Cristo en todo.

¿Cuál es el significado de ver a Dios, la promesa contenida?

Solo con un corazón limpio puedo ver a Dios, y solo Dios puede hacernos de corazón limpio.

(Isaías 1:18 Venid luego, dice Jehová, y estemos a cuenta: si vuestros pecados fueren como la grana, como la nieve serán emblanquecidos; si fueren rojos como el carmesí, vendrán a ser como blanca lana). (Apocalipsis 22:14 Bienaventurados los que lavan sus ropas, para tener derecho al árbol de la vida, y para entrar por las puertas en la ciudad).

¿Qué es ver a Dios?

En un sentido es la más extraordinaria y profunda promesa de toda la Escritura. Esta capacidad de ver a Dios es el motor para mayor purificación! ¿Y cómo le vemos, si Dios es espíritu?

Ciertamente Dios es espíritu, por tanto, invisible. Sin embargo no hay contradicción.

  1. los puros de corazón ahora tienen una visión que antes no tenían. (2 Corintios 4:3-4 Pero si nuestro evangelio está aún encubierto, entre los que se pierden está encubierto;en los cuales el dios de este siglo cegó el entendimiento de los incrédulos, para que no les resplandezca la luz del evangelio de la gloria de Cristo, el cual es la imagen de Dios). Dios ha abierto nuestros ojos para ver el cielo, la gloria de Dio, el evangelio, la salvación… (1 Corintios 2:9 Cosas que ojo no vio, ni oído oyó, ni han subido en corazón de hombre, son las que Dios ha preparado para los que le aman), cosas que el hombre natural no puede ver, ni siquiera percibir (v.14 Pero el hombre natural no percibe las cosas que son del Espíritu de Dios, porque para él son locura, y no las puede entender, porque se han de discernir espiritualmente). Amadas hermanas, al puro de corazón se le han abierto los ojos para ver lo invisible! (2 Corintios 4:16-18 Por tanto, no desmayamos; antes aunque este nuestro hombre exterior se va desgastando, el interior no obstante se renueva de día en día. Porque esta leve tribulación momentánea produce en nosotros un cada vez más excelente y eterno peso de gloria;no mirando nosotros las cosas que se ven, sino las que no se ven; pues las cosas que se ven son temporales, pero las que no se ven son eternas). 
  2. Nuestra alma tiene ojos, la fe. Gracias a la fe estamos capacitadas para ver lo invisible! (Hebreos 11:1 Es, pues, la fe la certeza de lo que se espera, la convicción de lo que no se ve) La fe no es un salto al vacío, la fe es una convicción plantada en el alma por el Espíritu Santo, en toda persona salvada por la gracia divina. ¿Puede un ciego de nacimiento decir que no existen los colores porque nunca los ha visto? Los puros de corazón poseen la capacidad de ver a Dios en una forma que los demás no pueden, desde ahora, en el presente, puesto que el Espíritu Santo nos ha sido dado como garantía (Efesios 1:13-14 En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa,que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria; Salmo 16:11 Me mostrarás la senda de la vida; en tu presencia hay plenitud de gozo; delicias a tu diestra para siempre; Gálatas 5:22-23 Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia, benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza; contra tales cosas no hay ley). El limpio de corazón ve a Dios al discernir su verdadero carácter; al incrédulo le resulta imposible reconciliar que Dios es infinitamente santo y justo, al mismo tiempo que infinitamente bueno y amoroso.
  3. Las puras de corazón ven a Dios al percibir su presencia en todas las cosas. Revisen el Salmo 104 en su casa, 🙂 Ven la mano de Dios en cada uno de los elementos de la naturaleza, ve a Dios es la Escritura, la voz de Dios escrita y preservada para su pueblo (¡cuántos leen y no ven a Dios en ninguna de sus páginas!
  4. Las puras de corazón ven a Dios en todo lo que les ocurre, sea “bueno” o sea “malo.” Dios es soberano, y eso nos llena de confianza. Recrea la escena: Moisés frente al Mar Rojo, responsable de +600,000 personas en medio del desierto, sin armas para defenderse, con los egipcios detrás… ¿Cuál fue la diferencia? Hebreos 11:27 Por la fe dejó a Egipto, no temiendo la ira del rey; porque se sostuvo como viendo al Invisible; 23-29). ¿Por qué se amargan tantos, se deprimen ante cualquier circunstancia negativa? Porque viven sin esperanza y sin Dios. Pero lo mismo puede suceder al creyente, las impurezas enturbian la visión (Mateo 14:28-31 Entonces le respondió Pedro, y dijo: Señor, si eres tú, manda que yo vaya a ti sobre las aguas.Y él dijo: Ven. Y descendiendo Pedro de la barca, andaba sobre las aguas para ir a Jesús. Pero al ver el fuerte viento, tuvo miedo; y comenzando a hundirse, dio voces, diciendo: ¡Señor, sálvame!Al momento Jesús, extendiendo la mano, asió de él, y le dijo: ¡Hombre de poca fe! ¿Por qué dudaste?). Tenemos simpatía por Pedro, pero Cristo le reprendió por su poca fe. Las circunstancias no cambiaron, el problema fue la visión de Pedro. Impureza de corazón produce dudas. ¿Cómo sabemos si alguien crece en santidad? Cuando su visión es más diáfana cada vez.

De modo que vemos a Dios a diario, en sentido presente y cotidiano. El limpio de corazón ve la mano de Dios: cómo le protege, suple necesidades, cómo le guía, ve la presencia del Señor en la reunión de los santos… el creyente puede decir “Dios me ha dado la sabiduría necesaria, me ha consolado” “Dios ha intervenido en esta prueba.”

Cuando nuestros deseos cambian, se aclara nuestra visión de Dios. ¿Por qué? Porque ya no hacemos lo mismo, hacemos a un lado aquellas cosas que creíamos nos daban satisfacción y ahora buscamos hacer la voluntad de Dios. 

¿Será una coincidencia que Cristo tenía una visión muy clara del Padre? De ninguna manera, fue que se pasó 33 años sin pecar, de tal modo que soportó las tentaciones en el desierto.

Tú y yo pecamos 75 veces antes del desayuno, y nos maravillamos de la lucha que enfrentamos para establecer comunión con Dios. 

En un sentido final, también veremos a Dios tal como él es (1 Juan 3:2-3  Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es.Y todo aquel que tiene esta esperanza en él, se purifica a sí mismo, así como él es puro).

Carácter exhibe fruto de purificación. Carácter anhela santidad.

Apuntes a Mateo 5:7 (parte 3)

Estándar

3) ¿Deberá alguien misericordioso mostrar siempre misericordia? o ¿puede un creyente ser un fiscal acusador?

Familia, negocios y trabajo, gobierno y leyes, la iglesia. La voluntad de Dios es que algunas veces recompensaremos a otros con lo que se merecen, ya sea sanción o recompensa (esto es, justicia). Otras veces, la voluntad de Dios es que recompensemos mejor de lo que se merecen (esto es, misericordia). Al proclamar justicia, damos testimonio a la verdad de que Dios es Dios de justicia. Al proclamar misericordia, damos testimonio a la verdad de que Dios es Dios de misericordia.

¿Cómo discernir? Manteniéndonos lo más cerca de Cristo. El propósito de la Escritura es producir una cierta clase de persona, no proveer una lista exhaustiva de reglas para cada situación. La bienaventuranza dice “bienaventurados los misericordiosos”, no dice “Bienaventurados los que saben exactamente cuándo y dónde mostrar misericordia en cada circunstancia.” 

Ser misericordiosas incluso al actuar con severidad sirviendo a la justicia. ¿Cómo? Siendo pobres en espíritu, dolidas x nuestro pecado, libres de estar a la defensiva y/o autoexaltarnos, teniendo hambre y sed de justicia por hacer lo justo y recto, perceptivas de la desgracia y miseria ajena, siendo compasivas ante el dolor ajeno, y haciendo esfuerzos por hacer bien al mayor número de personas.

¿Deberá alguien misericordioso mostrar siempre misericordia? No. Pero es un no calificado, los receptores han de ver la misericordia al obrar.

4) ¿Por qué solo el misericordioso encontrará misericordia de Dios en el día de juicio final, si la salvación es por gracia mediante la fe?

La misericordia se halla íntimamente ligada al tema del perdón. ¿Recuerdan la parábola de los dos deudores? (Mateo 18:21-35 Entonces se le acercó Pedro y le dijo: Señor, ¿cuántas veces perdonaré a mi hermano que peque contra mí? ¿Hasta siete?Jesús le dijo: No te digo hasta siete, sino aun hasta setenta veces siete.

Por lo cual el reino de los cielos es semejante a un rey que quiso hacer cuentas con sus siervos. Y comenzando a hacer cuentas, le fue presentado uno que le debía diez mil talentos. A este, como no pudo pagar, ordenó su señor venderle, y a su mujer e hijos, y todo lo que tenía, para que se le pagase la deuda. Entonces aquel siervo, postrado, le suplicaba, diciendo: Señor, ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo. El señor de aquel siervo, movido a misericordia, le soltó y le perdonó la deuda. Pero saliendo aquel siervo, halló a uno de sus consiervos, que le debía cien denarios; y asiendo de él, le ahogaba, diciendo: Págame lo que me debes.Entonces su consiervo, postrándose a sus pies, le rogaba diciendo: Ten paciencia conmigo, y yo te lo pagaré todo.Mas él no quiso, sino fue y le echó en la cárcel, hasta que pagase la deuda. Viendo sus consiervos lo que pasaba, se entristecieron mucho, y fueron y refirieron a su señor todo lo que había pasado.Entonces, llamándole su señor, le dijo: Siervo malvado, toda aquella deuda te perdoné, porque me rogaste.¿No debías tú también tener misericordia de tu consiervo, como yo tuve misericordia de ti? Entonces su señor, enojado, le entregó a los verdugos, hasta que pagase todo lo que le debía. Así también mi Padre celestial hará con vosotros si no perdonáis de todo corazón cada uno a su hermano sus ofensas).

¿Qué habrá hecho este siervo para deber tal cantidad? 120 mil millones de pesos (10,000 talentos), más o menos, versus 240,000 pesos dominicanos (100 denarios). ¿Por qué esta parábola tiene un final ‘infeliz’? ¡Cristo invierte la bienaventuranza! aquellos que no tienen misericordia no alcanzarán misericordia. Enseña con todo propósito para que sus palabras se graben en nuestra mente y corazón. 

Recordemos que Cristo está cambiando las expectativas que tenían los discípulos y el pueblo en general. Los discípulos esperaban justicia, no misericordia. Justicia con cetro de hierro. ¿Notan por qué se nos tiene que insistir en la misericordia? 

Si alguien nos ofende, ¿cuál es nuestra primera reacción? ¡Justicia! Pero ¿si las ofensoras somos nosotras? ¡Misericordia! Más vale que recordemos esto, porque se supone que hemos de tratar a los demás como a nosotras mismas…

Carácter lleva el fruto de misericordia.

Apuntes a Mateo 5:7 (parte 2)

Estándar
  1. ¿Cómo se hace misericordioso un corazón? O, ¿de dónde proviene la misericordia?

De un corazón que primero reconoce su pobreza de espíritu, su bancarrota espiritual. Reconoce duelo por su pecado y ha aprendido a esperar mansamente el tiempo de Dios, así como a tener hambre y sed por la obra de Dios que satisface su justicia.

De inmediato encontramos una dificultad: ¿dice Cristo que recibiremos misericordia solo si mostramos la misma? Correcto. Pero esto no significa que la causa de recibir misericordia es porque la ganamos. No hay relación alguna causa-efecto. Ambas premisas son ciertas y, de hecho, se necesitan mutuamente, pero la primera (BV los misericordiosos) no es la causa de la segunda (alcanzarán misericordia), ambas premisas son descripciones de una misma realidad, una en el presente y otra en el futuro.

Tengo una mata de uva en mi patio, una parra. ¿Por qué da uvas? Porque esa es su naturaleza, da uvas porque es una parra, no porque yo la halla sembrado. A diario contamos con la misericordia divina: respiramos, los alimento, somos librados de innumerables tentaciones, de una misma, etc. Ser misericordiosas es el resultado natural de haber recibido a Cristo y experimentar su gracia; quien ama la justicia crece en santidad y estará lleno de M.

Hambre y sed de justicia? Completa con misericordia.

Porque hay una falsa justicia, la que dice “me las pagarás” porque eso es lo justo. Pero lo que Cristo describe es santidad, misericordia capaz de perdonar ofensas (Miqueas 6:8 Oh hombre, él te ha declarado lo que es bueno, y qué pide Jehová de ti: solamente hacer justicia, y amar misericordia, y humillarte ante tu Dios).

La BV describe lo que el cristiano ES. Observen que no dice “bienaventurados los que hacen misericordia” sino “bienaventurados los misericordiosos” o sea aquellos cuyo corazón es así. Porque si SOMOS, haremos. ¿Vemos las BV como un espejo para discernir lo que somos? ¿Ven que el cristianismo apunta al corazón? La pregunta no es qué haces, sino quién eres.

  1. ¿Qué es misericordia? O ¿cómo luce alguien misericordioso?

¿Es gentileza, quizás? La misericordia incluye gentileza, pero es mucho más que eso. Gentileza es una amiga que te llama cuando estás bien; misericordia es una amiga que te llama cuando estás enferma.

Luego resulta mejor ver la parte contraria para entender lo primero. (Mateo 9:10-13 Y aconteció que estando él sentado a la mesa en la casa, he aquí que muchos publicanos y pecadores, que habían venido, se sentaron juntamente a la mesa con Jesús y sus discípulos. Cuando vieron esto los fariseos, dijeron a los discípulos: ¿Por qué come vuestro Maestro con los publicanos y pecadores? Al oír esto Jesús, les dijo: Los sanos no tienen necesidad de médico, sino los enfermos. Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio. Porque no he venido a llamar a justos, sino a pecadores, al arrepentimiento) En este pasaje lo opuesto a misericordia es el sacrificio (v.13), que cita Oseas 6:6 (Porque misericordia quiero, y no sacrificio, y conocimiento de Dios más que holocaustos). El punto es que Dios quiere corazones vivos: afecto hacia El y misericordia de unos con otros; no gente que realiza deberes religiosos de modo meramente formal.

Jesús ve la pobreza espiritual de los publicanos, su necesidad. Están enfermos y él tiene la medicina.

Los fariseos ven un problema ceremonial: contaminación al comer con pecadores. Se encuentran esclavizados a los aspectos triviales de la limpieza ceremonial, se olvidan de la enfermedad espiritual. Así que lo contrario a misericordia es esclavitud a la trivialidad religiosa.

(Mateo 23:23-24 ¡Ay de vosotros, escribas y fariseos, hipócritas! porque diezmáis la menta y el eneldo y el comino, y dejáis lo más importante de la ley: la justicia, la misericordia y la fe. Esto era necesario hacer, sin dejar de hacer aquello.¡Guías ciegos, que coláis el mosquito, y tragáis el camello!) ¿Qué es lo opuesto a misericordia en este pasaje?

¡Estar colando mosquitos! Cristo enfatiza cuál es el mayor obstáculo y enemigo de la misericordia: la preocupación por asuntos triviales de la existencia. 

Esclavitud a lo trivial es la maldición de los no misericordiosos. Tengamos cuidado de cada día caer en lo trivial, pensar solo lo trivial, sentir solo lo trivial. Que nos pellizquemos por pasar horas frente a Netflix, sin hacer planes para lo que realmente importa.

Misericordia no es dejadez, apatía, pasividad; tampoco es un rasgo de carácter natural (nadie nace misericordioso). Misericordia es un rasgo del carácter de Dios, quien por obra del ES forja en nuestro corazón ese carácter misericordioso.

Apuntes a Mateo 5:7 (parte 1)

Estándar

7Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia.

  1. ¿Cómo se hace misericordioso un corazón? O, ¿de dónde proviene la misericordia?
  2. ¿Qué es misericordia? O ¿cómo luce alguien misericordioso?
  3. ¿Deberá alguien misericordioso mostrar siempre misericordia? o ¿puede un creyente ser un fiscal acusador?
  4. ¿Por qué solo el misericordioso encontrará misericordia de Dios en el día de juicio final, si la salvación es por gracia mediante la fe?

Hay un cambio de dirección en las bienaventuranzas. En las primeras cuatro vimos la relación del hombre con Dios, una relación vertical: el proceso de salvación pasa a ser proceso de santificación (pobres en espíritu, renacemos nuestra condición, nuestra carencia de recursos espirituales y como resultado, nos dolemos, crecemos en humildad), y a medida que maduramos aumenta nuestra hambre y sed no por nuestros deseos, sino de justicia en Cristo.

Y Cristo extiende bendición sobre nuestras necesidades. Ahora veremos como Cristo bendice nuestras obras. Las bienaventuranzas guardan cierta similitud con el decálogo de la Ley, que inicia con esa misma relación vertical entre Dios y el hombre y luego se enfoca en temas como no mentir, no codiciar, asuntos entre los hombres, etc.

Tiene sentido. Cristo mismo dice que “vino a cumplir la ley y los profetas.” La regla de oro: amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, fuerza y mente (vertical), y a tu prójimo como a ti mismo (horizontal). El mismo patrón, siempre verdadero. Las primeras cuatro nos enseñan el proceso de arrepentimiento (pobreza de espíritu, duelo, humildad, hambre y sed), las segundas cuatro tienen que ver con los resultados -el fruto- del arrepentimiento. ¿Cómo respondemos al mundo que nos rodea? Cristo señala misericordia, pureza, reconciliación e identificación.

Quizás, la mejor ilustración de misericordia se encuentra en la parábola del buen samaritano (Lucas 10:25-37Y he aquí un intérprete de la ley se levantó y dijo, para probarle: Maestro, ¿haciendo qué cosa heredaré la vida eterna?Él le dijo: ¿Qué está escrito en la ley? ¿Cómo lees? Aquel, respondiendo, dijo: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, y con toda tu alma, y con todas tus fuerzas, y con toda tu mente; y a tu prójimo como a ti mismo. Y le dijo: Bien has respondido; haz esto, y vivirás.

Pero él, queriendo justificarse a sí mismo, dijo a Jesús: ¿Y quién es mi prójimo? Respondiendo Jesús, dijo: Un hombre descendía de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de ladrones, los cuales le despojaron; e hiriéndole, se fueron, dejándole medio muerto.Aconteció que descendió un sacerdote por aquel camino, y viéndole, pasó de largo.Asimismo un levita, llegando cerca de aquel lugar, y viéndole, pasó de largo.Pero un samaritano, que iba de camino, vino cerca de él, y viéndole, fue movido a misericordia;y acercándose, vendó sus heridas, echándoles aceite y vino; y poniéndole en su cabalgadura, lo llevó al mesón, y cuidó de él.Otro día al partir, sacó dos denarios, y los dio al mesonero, y le dijo: Cuídamele; y todo lo que gastes de más, yo te lo pagaré cuando regrese. ¿Quién, pues, de estos tres te parece que fue el prójimo del que cayó en manos de los ladrones? Él dijo: El que usó de misericordia con él. Entonces Jesús le dijo: Ve, y haz tú lo mismo). El escriba haciendo preguntas trampa (capciosas), pero los judíos son expertos en responder preguntas con otra pregunta. 🙂 Observen que en la respuesta final el escriba evita utilizar la palabra “samaritano” de modo que Cristo ilustra la amplitud de ese segundo mandamiento (ama a tu prójimo) e incluyendo la misericordia con una descripción muy gráfica.

Tenemos una fotografía bien detallista aquí:

  1. la misericordia ve la desgracia ajena (v.33)
  2. la misericordia responde compasivamente hacia la persona en desgracia (v.33)
  3. la misericordia responde en lo externo con algún esfuerzo práctico para aliviar la desgracia ajena (v.33)
  4. la misericordia actúa incluso cuando la persona en desgracia sea enemiga (v.33)

Ojos para ver, corazón compasivo, esfuerzos de ayuda, a pesar de enemistad. Eso es misericordia. Igual que en Mateo 9:13 (Id, pues, y aprended lo que significa: Misericordia quiero, y no sacrificio): el sacerdote y levita como ejemplos del formalismo religioso. Cuidémonos de no ser víctimas del formalismo, de permanecer en rutinas mecánicas de actividad religiosa, sin ojos para ver la desgracia ajena, sin corazón para responder, sin hacer esfuerzo alguno para llevar el consuelo del evangelio.

Misericordia no es un sentimiento, es algo que nos lleva a la acción. Observen las palabras del escriba “el que usó de misericordia”; misericordia es algo práctico, parte de lo cotidiano. El samaritano buscó obrar en el contexto de la necesidad inmediata puesta delante de él, y trajo alivio. 

Miserere = miseria, necesidad, compadecerse, compasión (valor que conjuga la empatía y la comprensión hacia el sufrimiento ajeno); Cordis, de Cor = corazón; ia = hacia los demás. Misericordia es la capacidad de sentir compasión y brindar apoyo; capacidad de sentir la desdicha ajena y ofrecer ayuda. Pero OJO: misericordia no es lástima, lástima es enternecimiento y compasión provocada por males de otros, lástima es un sentimiento temporal que no mueve a la acción, no necesariamente termina en un acto bondadoso. No hay que irse a un país lejano para ser misericordioso, empecemos con los de cerca, pues todos somos pastores los unos de los otros.

Hemos conocido la progresión de las BV donde el Señor describe el carácter cristiano, el ADN del ciudadano de la ciudad celestial: quien ama la justicia crece en santidad y estará lleno de misericordia. 

Apuntes a Mateo 5:6

Estándar

6Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados.

Hambre y sed constituyen necesidades físicas fundamentales. Pero ¿hambre y sed de justicia? 

Dios ha sembrado este anhelo de eternidad en nuestro corazón, luego buscamos vacaciones con paisajes de ensueño, grandes obras de arte, películas, extravagancias, rigores ascéticos. Pero el anhelo continúa en nuestro interior(Isaías 55:2-3 ¿Por qué gastáis el dinero en lo que no es pan, y vuestro trabajo en lo que no sacia? Oídme atentamente, y comed del bien, y se deleitará vuestra alma con grosura.Inclinad vuestro oído, y venid a mí; oíd, y vivirá vuestra alma; y haré con vosotros pacto eterno, las misericordias firmes a David; Jeremías 2:12-13 Espantaos, cielos, sobre esto, y horrorizaos; desolaos en gran manera, dijo Jehová. Porque dos males ha hecho mi pueblo: me dejaron a mí, fuente de agua viva, y cavaron para sí cisternas, cisternas rotas que no retienen agua).

La idea de buscar justicia no es muy popular en nuestros días, muchos buscan “madurez espiritual, felicidad real, el poder del Espíritu” y no sé cuántas cosas más; otros van de conferencia en conferencia o de pastor en pastor buscando alguna vaga “bendición” de lo alto. Tienen hambre de experiencia espiritual, tienen sed de la consciencia divina. ¿Pero cuantos tienen hambre y sed de justicia?

Por favor no mal entiendan, lo anterior es deseable pero no básico. Para algunos, las bienaventuranzas son una especie de mapa de direcciones para alcanzar el reino de los cielos. Pero hemos aprendido que las bienaventuranzas señalan las características de alguien que ya llegó, es decir que ha entrado al reino de los cielos.

Las bienaventuranzas son más bien un espejo que muestra la realidad. Piensa, ¿por qué o para qué nos miramos en un espejo? Oh, para constatar la condición en que estamos, ver si es necesario corregir esto o aquello, pero nada más.  ¡Los espejos no ofrecen direcciones!

Ya vimos que los discípulos tenían hambre y sed de poder, autoridad, reconocimiento, estaban cansados de la tiranía romana. Pero Jesucristo señala que los ciudadanos del reino se distinguen por hambre y sed de justicia, y serán saciados. Este ciudadano está marcado por pobreza de espíritu, dolor por su pecado personal y social, se acerca a Dios en humildad y en consecuencia anhela con hambre y sed la justicia de Dios. No puede vivir sin justicia.

¿Cómo definimos justicia? ¿De qué clase de justicia se trata? 

La idea de justicia aparece con regularidad en el Sermón del Monte, se puede decir que es uno de sus temas principales:

5:6 hambre y sed de justicia

5:10 persecusión por causa de la justicia;

5:20 justicia que excede la de escribas y fariseos;

6:1 realizar actos de justicia;

6:33 ante todo, buscar el reino de Dios y su justicia, sabiendo que todo será provisto.

Como ven, la palabra “justicia” aparece cinco veces en el Sermón del Monte, es bueno repasar el contexto para obtener más claridad en la palabra “justicia”. Las referencias más cercanas son 5:10 y 5:20.

¿Qué significa en 5:10? 

Recordemos que hay 8 bienaventuranzas, el v.10 es la última y el v.11 es una expansión de la misma. La primera (v.3) y la última (v.10) terminan igual: «porque de ellos es el reino de los cielos.” (un sandwich). Ahora bien, en la estructura encontramos dos grupos de 4, donde ambos terminan con la misma referencia: “justicia”.

El primer grupo de 4 termina en el v.6.

El segundo grupo de 4 termina en el v.10

En el primer grupo, las 3 bienaventuranzas que conducen a hambre y sed de justicia son descripciones de carencia o pasividad: pobreza de espíritu (v.3), lloro de nuestra miseria (v.4), mansedumbre que acepta críticas sin caer en retaliación o en estar a la defensiva (v.5).  No son características de alguien super satisfecho. De modo que ahora el Señor hace una transición, de carencia a abundancia, al señalar que quienes tienen hambre y sed de justicia son bienaventurados.

Las siguientes 3 bienaventuranzas, luego de ser saciados, inició con los misericordiosos (v.7) ¿Por qué? Porque la persona está llena y rebosante. v.8 habla de pureza de corazón y v.9 que es alguien pacificadora (no pacífica, ojo). Ahora bien, algo muy importante a tener presente es que las primeras tres son pasivas en esencia, se refieren a la condición interna del creyente: puedo exhibir mansedumbre porque me duelo por mi condición porque reconozco quién soy delante de Dios. Una bienaventuranza lleva a la otra, cada una depende de las anteriores.

Pero ahora, 6Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados implica búsqueda, un anhelo, es pues una bienaventuranza activa.

¿Ven la estructura? El primer grupo describe al doliente, pobre, que en quietud percibe hambre y sed de justicia. El segundo grupo describe al misericordioso, puro, pacificador, de manera tal que “justicia” es aquello que nos llena de misericordia, pureza y hacedores de paz. Justicia es un patrón de vida conforme a la voluntad de Dios. No es alguien perdido en rituales religiosos o en trivialidades doctrinales.

Si recordamos, Cristo habla a un grupo de personas versadas en las escrituras del AT. En el AT, “justicia” es sinónimo de “salvación.”

Isaías 32:17Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempreeternidad
Isaías 46:12-13Oídme, duros de corazón, que estáis lejos de la justicia: Haré que se acerque mi justicia; no se alejará, y mi salvación no se detendrá. Y pondré salvación en Sion, y mi gloria en Israel.paralelismo entre justicia y salvación
Isaías 51:5-6Cercana está mi justicia, ha salido mi salvación, y mis brazos juzgarán a los pueblos; a mí me esperan los de la costa, y en mi brazo ponen su esperanza. Alzad a los cielos vuestros ojos, y mirad abajo a la tierra; porque los cielos serán deshechos como humo, y la tierra se envejecerá como ropa de vestir, y de la misma manera perecerán sus moradores; pero mi salvación será para siempre, mi justicia no perecerá.mi justicia [mi salvación] no perecerá
Isaías 56:1Así dijo Jehová: Guardad derecho, y haced justicia; porque cercana está mi salvación para venir, y mi justicia para manifestarse.paralelismo entre justicia y salvación

Esto fue lo que entendieron quienes escuchaban las palabras del Señor en lo alto de la montaña. Pero ahora,

¿Qué significa en 5:20?

(si vuestra justicia no fuere mayor que la de escribas y fariseos, no entraréis en el reino de los cielos).

El contexto demanda que entendamos plenamente el significado de “ser saciados con justicia.” El Señor concede a tal persona hambrienta y sedienta los deseos de su corazón pero al mismo tiempo aumenta ese mismo deseo de hambre y justicia (Juan 4:14 mas el que bebiere del agua que yo le daré, no tendrá sed jamás; sino que el agua que yo le daré será en él una fuente de agua que salte para vida eterna; 6:35 Jesús les dijo: Yo soy el pan de vida; el que a mí viene, nunca tendrá hambre; y el que en mí cree, no tendrá sed jamás). Una paradoja que refiere el mismo Pablo cuando dice “yo sé en quién he creído… (2 Timoteo 1:12) quiero saber más! Filipenses 3:10).

El resto del capítulo ofrece 6 ejemplos de cómo nuestra justicia debe sobrepasar la de escribas y fariseos (los escrupulosos guardianes de la ley):

v.21-26, no matar y aún más, no guardar rencores sino procurar la paz;

v.27-30 no cometer adulterio, aún más, no codiciar las personas;

v.31-32 no condonar el divorcio solo por la provisión legal del AT, sino aún más, preservar nuestros compromisos;

v.33-37 no solo mantener nuestros pactos sino aún más, ser la clase de personas que no necesita hacer juramentos;

v.38-42 no sacar ojo x ojo, sino aún más, colocar la otra mejilla y devolver bien siempre

v.43-48 no solo amar a nuestra vecina sino aún más, amar a nuestro enemigo y orar por quienes nos persiguen.

Misericordia, pureza de corazón, hacedores de paz: todo ello implicado en la palabra “justicia”.

Vivir conforme a la voluntad de Dios.

En esencia, ser justos es pureza absoluta de carácter, es traer todo el hombre interior a conformidad con la mente y voluntad de Cristo. Va de la mano con la palabra santidad. Cuando la escritura señala que Dios es santo significa que no hay pecado en él, no hay oscuridad; ¿anhelamos ser así? (1 Corintios 1:30 Mas por él estáis vosotros en Cristo Jesús, el cual nos ha sido hecho por Dios sabiduría, justificación, santificación y redención). Hambre y sed de justicia es hambre y sed por Cristo mismo.

¿Perfección? Cuando lleguemos al cielo, correcto. Pero mientras tanto que nuestro anhelo sea ser conformados cada vez más a imagen de Cristo aquí en la tierra; ser santos en todo lo posible al ser hechos salvas. Hay un ciclo de crecimiento sencillo de entender si recordamos que la justicia del texto se refiere a vivir conforme a la voluntad de Dios, no a mera obediencia de reglas.

Y aquí entra de nuevo la famosa voluntad de Dios: ser salvos, llenos de su Espíritu, santos, sumisos, sufridos (sí), obedientes de corazón (acto de adoración).

Naturalmente habrá persecución (2 Timoteo 3:12 Y también todos los que quieren vivir piadosamente en Cristo Jesús padecerán persecución). El costo de adoptar el carácter de Cristo es identificarse con el sufrimiento de Cristo.

¿Anhelamos este carácter sin que importe el costo? 

¿Se dan cuenta que quienes carecen son los bienaventurados en el reino de los cielos?

Carecen de recursos espirituales, carecen de comodidad, carecen de agenda propia, carecen de justicia… y son llamados ¡bienaventurados!

En el Antiguo Testamento, la justicia se asocia al pacto de Dios. Dios es fiel al pacto. Dios siempre hará lo que deba hacer, es decir cumplir sus promesas. Por ello es que asociamos la palabra “justicia” a juicio o a salvación; sin embargo nos quedamos cortas, pues pensamos solo en condenación. Pero Dios no limita su justicia: (Isaías 32:17 Y el efecto de la justicia será paz; y la labor de la justicia, reposo y seguridad para siempre). Nos dice y luego explica su significado.

Si analizamos, nos daremos cuenta que sentir hambre o sed es una necesidad consciente, pero es también desagradable si no podemos satisfacerla [nadie disfruta pasar hambre]. Por otro lado es una sensación útil, nos recuerda la subsistencia del cuerpo. Y por último es una sensación muy real, nada imaginaria.

Así que tener hambre y sed de justicia tiene muchas caras.

  1. anhelo de relación correcta con Dios, y por tanto ser justos delante de él;
  2. anhelo de vivir en este mundo rectamente delante de él
  3. anhelo de ver relaciones justas restauradas en la vida de otros

¿Conocemos este anhelo de ser cada vez más parecidas a Cristo?

(Romanos 7:14 ¡Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte? 2 Corintios 5:4 Porque asimismo los que estamos en este tabernáculo gemimos con angustia; porque no quisiéramos ser desnudados, sino revestidos, para que lo mortal sea absorbido por la vida) ¡Gemimos!

La justicia que buscamos posee tres dimensiones (nuestra correcta relación como debiera ser):

  1. primeramente es provista por JC mismo (2 Corintios 5:21 Al que no conoció pecado, por nosotros lo hizo pecado, para que nosotros fuésemos hechos justicia de Dios en él);
  2. recibir a Cristo como nuestro Salvador, es decir, verle como Salvador que nos libra del poder del pecado y de su influencia; no solo perdona sino que además obra en nosotros el querer como el hacer en correcta relación con Dios ( Romanos 5:21 para que así como el pecado reinó para muerte, así también la gracia reine por [a través] la justicia para vida eterna mediante Jesucristo, Señor nuestro). No es posible tomar el regalo de Cristo (perdón) pero negar sus demandas (vida justa). Es lo que D. Bonhoeffer denominó “gracia barata”: un Salvador que nos deja tal cual estábamos, no es posible

Esta distinción es clave, luego algunos hablan de “cristianos carnales” y de “cristianos espirituales.” (citan 1 Corintios 3:1-4 De manera que yo, hermanos, no pude hablaros como a espirituales, sino como a carnales, como a niños en Cristo. Os di a beber leche, y no vianda; porque aún no erais capaces, ni sois capaces todavía,porque aún sois carnales; pues habiendo entre vosotros celos, contiendas y disensiones, ¿no sois carnales, y andáis como hombres?Porque diciendo el uno: Yo ciertamente soy de Pablo; y el otro: Yo soy de Apolos, ¿no sois carnales?). Sin embargo, el punto de Pablo es que quienes no muestran una práctica de justicia se comportan como gente que no son cristianas, no que muestren un “cristianismo inferior.” Tales personas son un manojo de contradicciones.

3) la tercera dimensión es que anhelamos ver la justicia de Dios establecida en todas partes. Vivir en integridad moral y vivir en relaciones justas. Evangelismo y misiones (reformas sociales) son temas que van juntos. Cada parte es una aplicación de nuestro anhelo que prevalezca la justicia en el mundo de Dios (Mateo 6:10 Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo, así también en la tierra). 

Carácter tiene hambre y sed de justicia. (Juan 7:37-39a En el último y gran día de la fiesta, Jesús se puso en pie y alzó la voz, diciendo: Si alguno tiene sed, venga a mí y beba. El que cree en mí, como dice la Escritura, de su interior correrán ríos de agua viva. Esto dijo del Espíritu que habían de recibir los que creyesen en él; pues aún no había venido el Espíritu Santo). ¡Ríos de agua viva! El consuelo del ES una vez creemos y somos salvas: fe y arrepentimiento son la clave. Creer lo que Dios dice de sí mismo y sobre nosotras. Por tanto, quien confía en Cristo muestra las características del ciudadano del reino de los cielos. Saciadas desde el instante mismo que tenemos hambre y sed de justicia y acudimos a Cristo, igual que el publicano, una y otra vez. Es un proceso continuo de santificación progresiva hasta ser completado (1 Juan 3:2 Amados, ahora somos hijos de Dios, y aún no se ha manifestado lo que hemos de ser; pero sabemos que cuando él se manifieste, seremos semejantes a él, porque le veremos tal como él es). Una paradoja, pues al ser saciadas, tenemos más hambre y sed de Cristo mismo.

Los discípulos han empezado a comprender que este reino de los cielos, como su rey, son completamente diferentes a los reinos terrenales que conocen. Este es un reino donde el primero será último, y los últimos, primeros.

Queridas, ¡cuidémonos de las necesidades que el ambiente o el mundo nos crea, se multiplicarán las insatisfacciones!  El tema no es que falte esto o aquello, sino que deseamos lo que no debemos o no necesitamos. ¿Será que el pasto parece más verde del otro lado porque tu foco central no es la justicia sino el perseguir otras cosas? Pensemos por un momento en la dedicación que nos lleva a planificar la dieta de cada día, qué comer o qué beber…  que nuestra oración sea perseverar en santidad, propia, en relaciones con todos y en el mundo.

Más que otra cosa, la justicia implica pureza de carácter y relaciones correctas -entre nosotros y Dios, entre unos y otros, y en el mundo en general. Nuestra hambre y sed de justicia es producto de necesidad personal, proviene de un corazón quebrantado, y por ello esta bienaventuranza va de la mano con aquella que nos dirige a la calidad del cuidado cristiano que distingue al verdadero creyente.

¿Cuál es el fruto del carácter? Misericordia.

Apuntes a Mateo 5:5

Estándar

5“Bienaventurados los mansos, porque ellos recibirán la tierra por heredad.

Los mansos. Ummm…

¿En qué consiste ser manso, mansa? 

Solemos ver esa característica como una debilidad. Tomas Watson escribe que se trata de la “gracia que nos capacita por el Espíritu Santo para moderar nuestras pasiones.” Constituye una fortaleza de carácter, poder bajo control. Alguien que sabe dominarse y se somete voluntariamente bajo el gobierno de otro. Voluntariamente coloca las necesidades ajenas por encima de las propias, hace a un lado su agenda y su voluntad. 

Ahora bien, no se trata de cobardía, tampoco es indolencia (insensibilidad, que no se afecta o conmueve). Y tampoco confundir con “buena educación.”

Mansedumbre es parte del fruto del Espíritu. Observen que en las bienaventuranzas hay una progresión: alguien con pobreza de espíritu se lamentará de su pecado y lo expresará siendo mansa. No se trata de algo aprendido, ni es natural. Ser mansas es el producto de un nuevo entendimiento, una visión adecuada de lo que somos delante de Dios (Mateo 7:26-30 …Respondiendo él, dijo: No está bien tomar el pan de los hijos, y echarlo a los perrillos. Y ella dijo: Sí, Señor; pero aun los perrillos comen de las migajas que caen de la mesa de sus amos.Entonces respondiendo Jesús, dijo: Oh mujer, grande es tu fe; hágase contigo como quieres. Y su hija fue sanada desde aquella hora).

Somos llamadas a ser mansas delante de Dios y delante de los hombres.

Mansedumbre hacia otros significa que somos enseñables, que sobrellevamos insultos, ofensas y malos tratos (Mateo 11:29 llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas). Porque recordamos quiénes somos delante de Dios, y porque sabemos que no se devuelve mal por mal.

La mansedumbre hace el bien incluso a quienes lo aborrecen (Mateo 5:43-48 Oísteis que fue dicho: Amarás a tu prójimo, y aborrecerás a tu enemigo. Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen; para que seáis hijos de vuestro Padre que está en los cielos, que hace salir su sol sobre malos y buenos, y que hace llover sobre justos e injustos.Porque si amáis a los que os aman, ¿qué recompensa tendréis? ¿No hacen también lo mismo los publicanos? Y si saludáis a vuestros hermanos solamente, ¿qué hacéis de más? ¿No hacen también así los gentiles? Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.) Pero además, porque entendemos que hemos pecado contra el Dios santo, ¡no tenemos derechos! Este concepto es difícil de aceptar, pues somos ciudadanas de los cielos porque somos hijas de Dios a causa del evangelio, ¿no es así?

Es decir que una persona mansa no se victimiza, no cae en la autocompasión o autoconmiseración [compasión que se tiene del mal de alguien]. 

¿Acaso no tengo derecho a ser libre, gozar la vida, acumular cosas, perseguir la felicidad?

Mmm, ¿perseguir felicidad? La felicidad suele estar ligada a las circunstancias, que cambian a cada momento.  Muy diferente al contentamiento, el cual se encuentra ligado a Dios, y Dios no cambia.

¿Se dan cuenta que tener derechos nos hace sentir bien?

Luchamos contra el tema de mansedumbre porque lo sentimos extraño a nuestra naturaleza, sin embargo, hay una realidad presente: los mansos heredarán la tierra en tiempo futuro, pero ahora, quien niega sus derechos hereda la tierra ahora. ¿Por qué? ¡Porque es la única persona con real contentamiento! 

Porque mi fe está anclada en el carácter de Dios, no en mis circunstancias. Mientras el resto del mundo anda persiguiendo felicidad, la mujer mansa está en paz, contenta cualquiera sea su situación (Salmo 37:16 Mejor es lo poco del justo, que las riquezas de muchos pecadores.; Proverbios 15:16 Mejor es lo poco con el temor de Jehová, que el gran tesoro donde hay turbación).

Tener carácter es negarse a uno mismo. Es ser sumisas a la voluntad de Dios (Salmo 39:9 Enmudecí, no abrí mi boca, porque tú lo hiciste) y a las necesidades de otros. Ser mansas es ser flexibles a las enseñanzas de la Escritura, una mujer que procura conformar su mente a la mente de Dios (Santiago 1:21 Por lo cual, desechando toda inmundicia y abundancia de malicia, recibid con mansedumbre la palabra implantada, la cual puede salvar vuestras almas).

Está dispuesta a perdonar y a pedir perdón cuando el caso lo requiere. 

Perdón real, no un simulacro, o sea no volver a tocar el tema ni de chiste, rechazar incluso la tentación de re-pensar el asunto. El perdón que otorga es total y es constante (Salmo 103:1-5; Santiago 3:2 …Porque todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende en palabra, este es varón perfecto, capaz también de refrenar todo el cuerpo).

Nuevamente la progresión, características del carácter: 

Carácter confiesa necesidad. Forma profunda de arrepentimiento.

Carácter es dolerse del pecado propio.

Ahora agregamos carácter es negarse a una misma. El producto de un nuevo entendimiento: al conocer a Cristo y su salvación, nos vaciamos de nosotras mismas, vemos nuestra pobreza espiritual y lloramos por lo terrible de nuestro pecado, de donde se desprende que amemos la voluntad de nuestro Dios. 

¿Ven por qué Mateo presenta el reino de los cielos como quien encuentra una perla de gran precio? 

La mansedumbre es una joya que completa nuestra vestimenta real (Colosenses 3:12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia), un verdadero adorno que atrae a los demás. Considera la tranquilidad de un espíritu afable y apacible, de gran estima delante de Dios! 

Mateo 11:29 llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas. 

¿Como aprender mansedumbre?

Meditando a menudo en la persona de Cristo y aprender de ello (Mateo 11:28-30 …Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.Llevad mi yugo sobre vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis descanso para vuestras almas; porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga). (Jeremias 6:16 Así dijo Jehová: Paraos en los caminos, y mirad, y preguntad por las sendas antiguas, cuál sea el buen camino, y andad por él, y hallaréis descanso para vuestra alma. Mas dijeron: No andaremos). 

¿Por qué algunos son mansos mientras que otros no? Sencillamente porque los unos están más cerca de Cristo (Filipenses 2:5 haya, pues, en vosotros este sentir que hubo también en Cristo), continuamente transformados. Dice Sugel Michelén que meditar es el aparato digestivo del alma.

Orando a diario que el Espíritu Santo nos supla de la gracia necesaria para controlar nuestras pasiones.

Considerando a menudo quiénes somos delante de Dios. La raíz de la mansedumbre empieza en la pobreza de espíritu.

Cultivando contentamiento cristiano. Ser mansas y estar contentas son gracias paralelas (Filipenses4:11 No lo digo porque tenga escasez, pues he aprendido a contentarme, cualquiera que sea mi situación). El árbol de la mansedumbre crece en el terreno del contentamiento.

Ponte en guardia ante las primeras manifestaciones de ira (un pequeño fuego en la cocina). Aplica de inmediato principios escriturales (Efesios 4:26 Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo. Proverbios 17:14 El que comienza la discordia es como quien suelta las aguas;Deja, pues, la contienda, antes que se enrede).

En adversidad u oposición, que sean pocas tus palabras. Prudencia es pensar antes de hablar (Proverbios 10:19 en las muchas palabras no falta pecado, mas el que refrena sus labios es prudente. Amós 5:13 por tanto, el prudente en el mal tiempo calla, porque el tiempo es malo).

¡Es obvio que lo vital es contar con un corazón regenerado para aplicar tales principios!

El proceso no termina aquí, pues se repite en nuestra santificación: hacer lo que es justo.

Apuntes a Mateo 5:4

Estándar

4“Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados.

La palabra “llorar” aquí significa “dolerse, estar en duelo.” Vine a ser la contraparte emocional de la pobreza de espíritu. Duelo es tristeza y dolor ante una pérdida, a menudo la asociamos con la muerte de un ser querido. Pero experimentar una decepción, perder el trabajo, reprobar un examen son también formas de duelo.

Ahora bien, JC nos habla de vida en el reino de Dios. La pobreza descrita se refiere al espíritu del hombre, no a su bolsillo. 

El duelo se refiere al dolor del hombre ante su propio pecado; arrepentimiento de las decepciones causadas a Dios. (Isaías 6:5 entonces dije ¡ay de mí! que soy muerto; porque siendo hombre inmundo de labios, y habitando en medio de pueblo que tiene labios inmundos, han visto mis ojos al Rey, Jehová de los ejércitos).

Carácter tiene raíz de duelo. El llorar de alguien que busca pureza según su propia fuerza y reconoce que no puede alcanzarla (Romanos 7:24 ¡Miserable de mí! ¿Quien me librará de este cuerpo de muerte?).

Para los discípulos, lo esperable era evitar el llanto, andar en sitios donde la tristeza no los alcance nunca. ¿Que cómo lo sabemos? Oh, porque nos encanta el juego comparativo: “al menos no soy tan mala como… ¿yo? muy bien…” Pero el creyente no excusa su pecado, ni lo disminuye ni lo ignora. Tampoco utiliza una balanza donde coloca sus buenas obras, sus mejores cualidades.

Como todas las gracias espirituales, es posible que confundamos la verdadera naturaleza de este duelo. NO debe equipararse con el espíritu cargado o depresivo.  Algunas somos de temperamento melancólico, introvertido, con una pobre imagen de nosotras mismas que se nota hasta en el caminar. Pero tales cosas también se ven en alguien absorto en sí mismo.

Quien se duele genuinamente a causa de su pecado es alguien vacío de sí mismo que ve a Dios en su santidad y gracia. Se duele porque ha visto a Dios (Salmo 130:3-4 JAH, si mirares a los pecados, ¿quien, oh Señor, podrá mantenerse? Pero en ti hay perdón para que seas reverenciado), sabe que le ha ofendido pero descubre la gracia del perdón.

Es la gracia de Dios lo que nos hace dolernos por nuestro pecado, derretir nuestros corazones y desarrollar la actitud correcta hacia el pecado, en llanto, vergüenza y dolor.

¿Quieres seguir la lógica terrenal? La mejor manera es apartarse de la Escritura. Porque la Palabra tiene poder para convencernos de pecado. Necesitamos llorar, pero lo que buscamos es comodidad. Creemos que hallaremos consuelo en otros, o en tal o cual cosa, “oh sí, me equivoqué, pero somos humanos…” 

Muchos van a la iglesia o leen la Escritura para ser consolados, no para dolerse. 

RC Sproul: “es un signo de nuestra época que venimos a la iglesia, y agrego, venimos a la Biblia, para juzgar el sermón, en lugar de que el mismo nos juzgue. Enjuiciamos la calidad del sermón y de paso al vecino. No permitimos que el sermón nos juzgue, porque si así fuera estaríamos de duelo. Lloraríamos.”

Si nos humilláramos, Cristo nos exaltaría (es lo que escribe Santiago).

Ser sensibles a nuestro pecado no significa vivir en desesperación. Además, las bienaventuranzas no suceden aisladas. Jesucristo describe al ciudadano integral del reino de los cielos. Alguien que saborea el consuelo del profundo amor de Dios en Cristo porque el evangelio consuela. 

Tener carácter es dolerse. (Isaías 61:1-3, el Espíritu de Jehová el Señor está sobre mí, porque me ungió Jehová; me ha enviado a predicar buenas nuevas a los abatidos, a vendar a los quebrantados de corazón, a publicar libertad a los cautivos, y a los presos apertura de la cárcel; a proclamar el año de la buena voluntad de Jehová, y el día de venganza del Dios nuestro; a consolar a todos los enlutados; a ordenar que a los afligidos de Dios se les de gloria en lugar de ceniza, óleo de gozo en lugar de luto, manto de alegría en lugar del espíritu angustiado; y serán llamados árboles de justicia, plantío de Jehová, para gloria suya

Lucas 4:16-21 …hoy se ha cumplido esta Escritura delante de vosotros).